La tormenta tropical Arlene, que llegó al este de México sin convertirse en huracán, mantiene a 17 de los 32 estados del país en distintos niveles de alerta, estando en nivel “rojo” (peligro máximo) los de Tamaulipas y Veracruz, informó hoy el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc).
Si bien anoche era sólo Veracruz la zona en máxima alerta, en las últimas horas se sumó el estado de Tamaulipas, que también recibirá lluvias torrenciales en sus zonas centro y sur, donde está la ciudad de Tampico.
El Servicio Meteorológico Nacional mexicano (SMN) explicó en un boletín emitido a las 7.30 hora local (12:30 GMT) que Arlene se ubicó 75 kilómetros al norte de Tuxpan, en Veracruz, y a 85 al sur-sudeste del puerto de Tampico, en Tamaulipas.
Además, indicó que en total la tormenta tropical afecta con lluvias a 22 estados del país.
Refirió que su índice de peligrosidad es “fuerte” debido al potencial de que deje “lluvias de intensas a torrenciales” en una amplia franja costera que iría de Veracruz hasta La Pesca.
El meteoro se desplaza a 13 kilómetros por hora hacia el oeste acompañado de vientos de 100 kilómetros por hora y rachas de hasta 120 kilómetros.
No obstante el pronóstico para las próximas horas, que serán de lluvia en buena parte del centro y este-nordeste de México, es que perderá fuerza y los vientos llegarán a 75 kilómetros por hora.
El Sinaproc, dependiente de la Secretaría de Gobernación, indicó en un parte informativo emitido a las 7:30 hora local (12:30 GMT), que aparte de la “alerta roja” en Veracruz y Tamaulipas, mantiene en nivel “naranja” (peligro alto) a San Luis Potosí.
En “alerta amarilla” (peligro moderado) están los estados de Hidalgo y Puebla, en el centro de México, y el de Tlaxcala en nivel “verde” (peligro bajo).
El grado más bajo, la “alerta azul” (peligro mínimo) abarca los estados de Nuevo León, norte de México, Querétaro, Estado de México, Distrito Federal y Morelos, zona centro, así como los de Yucatán, Quintana Roo, Chiapas y Oaxaca, en el sur-sudeste de México.
Las precipitaciones más intensas que se esperan pueden llegar a ser de 350 litros por metro cuadrado, detalló el SMN.
Estas lluvias “podrían causar daños a la infraestructura carretera y casas endebles, ligeras, a moderadas inundaciones, aumento en el nivel de presas, aumento en el caudal de ríos y arroyos, deslaves y desgajamientos en sierras (corrimientos de tierras)”, explicó el Sinaproc.
Por ello el organismo pide a la población que, en caso de estar en peligro, “acuda a un refugio temporal” o se ponga en contacto con las autoridades locales.
La temporada de huracanes en el Atlántico comenzó el 1 de junio y finaliza el próximo 30 de noviembre.
Las autoridades mexicanas prevén que en la temporada de huracanes de este año se formen 17 ciclones tropicales en cada uno de los océanos Pacífico y Atlántico, de los cuales unos catorce podrían impactar a México como depresión, tormenta tropical o huracán.